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7 dic 2013

"Niditos de Amor". Saberes subalternos para afectividades alternativas



Dibujo de Ana de la Escuela de Coiros
Aunque la idea de "nido de amor" es vieja y su uso en el español con frecuencia se ha aplicado al mito romántico, creo que puede re-explorarse para generar diversidad afectiva. Los “niditos de amor” hacen referencia a la necesidad de hacer proliferar, de manera activa, nuestros lugares para cultivar el afecto y la “buena vida”. Propone, frente al modelo del “Gran Nido” romántico heteronormativo, una narrativa más fluida y afectuosa, quizá anti-capitalista, en construcción, que de forma a la gran narrativa sobre la necesidad de crear espacios de amor y cuidado donde explorar con creatividad y seguridad las formas del querer.

No parte de ninguna dicotomía (ni razón/amor, ni amor/sexo, ni amor/dinero) sino que invita a explorar creativamente la construcción de redes seguras, de formas re-vitalizantes de cooperación y de lugares donde afrontar los conflictos o las dificultades sin el temor de la ruptura, sino con la generosidad que da la conciencia de la exploración compartida.
pastelitos tipo "niditos de amor"


Los “niditos de amor” pueden ser muy creativos, se pueden estirar o encoger, se pueden vincular, se puede volar de uno a otro y volver y se pueden deshacer (aunque este no sea su objetivo). Pueden servir para recuperarse y seguir volando o para quedarse (temporalmente). Son espacios muy claros en una cosa: son reparativos, nada paranoicos. Los materiales de construcción pueden ser muy diversos, de barro a palitos, pasando por todos los materiales e inmateriales que queráis, a veces duros, pero se van suavizando con la temperatura cálida que hay en el interior. No hay límites en el número de constituyentes de los niditos de una con una a …. (el límite de su sostenibilidad)... y pueden ser animados o inanimados y no necesariamente humanas, de todas las edades del tiempo. Se hablan muchos idiomas en el interior de estos lugares, pero la lingua franca es la ternura o en su defecto (hasta que se aprenda), la amabilidad.


Como todo espacio de creación y sostenimiento requiere co-responsabilizarse, lanzarse, retirarse o caminar en la cuerda floja. Está abierto a ideas y cariños, no busca un intercambio económicamente mediado ni lleva muy bien las cuentas, aunque si parte de negociar los conflictos y de lograr satisfacer necesidades, siempre que se pueda. No tiene como brújala las expectativas, ni falsas ni verdaderas. Busca espacios confortables para construir la intersubjetividad como vía para habitar subjetividades cohesionadas. Pero, cuidado, no es un espacio acomodaticio. A los niditos llegan cartas de amor (o no) y salen otras tantas. La intimidad fluye en los niditos, todo el meundo está atento al devenir de quienes lo componen y trata de autorregular la temperatura cálida necesaria para la convivencia. En el nidito se cree en el movimiento y en el afecto que genera la práctica, no da tanto valor a los pensamientos que van y vienen y que, a veces, son flujos huracanados.


En los niditos hay inspiración y se busca inspirarse en el antes, en el ahora y en la imaginación para el después. En las ciencias, las literaturas o las historias grandes y pequeñas. En los niditos se guisan ideas muy ricas, pero rellenas de cariño, y con salsas y otros bailes. Ahí, en esos niditos, no hay un antes y un después, pero nos encanta la primavera … y el otoño, cualquier momento que tenga posibilidades o quietud para cambiar sin aspavientos. Y risas … muchas risas (y sonrisas) para coger energías de donde se pueda. Si hay que reciclar, se recicla y se vuelve a empezar y a utilizar. Hay protagonistas y protagonismos pero van cambiando, como en los bailes, se sale y se entra, se descansa, se espera y se toma la iniciativa.
Actividad de convivencia con "Niditos de Amor"



Le dejo aquí pero si queréis podemos seguir construyendo este “nidito de ideas” totalmente abierto … en construcción, como los propios "niditos de amor" .

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